Puede sonar extraño, pero muchas personas adultas conservan uno o más dientes de leche sin saberlo. Si al mirarte al espejo notas un diente más pequeño, de forma diferente al resto, o si en una revisión te han dicho que aún conservas una pieza temporal, no te preocupes: no estás solo.
Desde nuestra clínica dental en Mallorca te explicamos por qué sucede esto, qué implicaciones puede tener, y cómo abordamos este tipo de casos con soluciones personalizadas.
¿Qué son los dientes de leche y cuándo deberían caerse?
Los dientes de leche, también conocidos como dientes temporales o deciduos, son las primeras piezas dentales que tenemos desde la infancia. Aparecen entre los 6 meses y los 3 años, y comienzan a caer a partir de los 6 años, siendo sustituidos poco a poco por los dientes definitivos.
Este proceso natural se completa, por lo general, alrededor de los 12 o 13 años. Sin embargo, en algunos casos excepcionales, uno o varios dientes de leche no se caen nunca. Y sí, pueden permanecer en la boca durante la adolescencia, la adultez e incluso toda la vida… si no se tratan.
¿Es normal tener dientes de leche siendo adulto?
No es lo común, pero sí es posible. Se estima que entre el 0,1% y el 2% de la población adulta tiene al menos un diente de leche que no fue sustituido por uno permanente. Esta situación se conoce como retención prolongada de dientes temporales.
Aunque puede no causar molestias al principio, con el paso del tiempo sí puede generar complicaciones funcionales y estéticas, por lo que es importante identificarlo y valorar el tratamiento más adecuado.
Principales causas de mantener un diente de leche en la edad adulta
En nuestra clínica dental de Mallorca hemos detectado varios factores que pueden explicar esta condición:
- Agenesia dental (falta de diente permanente): la causa más habitual. Ocurre cuando no se forma el diente definitivo que debía sustituir al de leche.
- Erupción retenida o desviada del diente definitivo: el diente permanente existe, pero no logra salir correctamente por falta de espacio o mal posicionamiento.
- Falta de revisiones dentales en la infancia: en algunos casos, al no hacer seguimientos ortodónticos a tiempo, no se detectan estos problemas.
- Factores genéticos: algunas personas tienen predisposición a este tipo de anomalías dentales.
¿Qué problemas puede causar un diente de leche en adultos?
Aunque no siempre da síntomas, conservar un diente de leche en la adultez puede acarrear ciertas complicaciones, como:
- Mayor fragilidad del diente: al no estar diseñado para durar toda la vida, el diente de leche puede fracturarse con el tiempo.
- Problemas de mordida o alineación dental: puede alterar la distribución de los dientes y provocar desajustes funcionales.
- Complicaciones estéticas: por su tamaño más pequeño o color, puede notarse visualmente.
- Reabsorción de la raíz: con el paso de los años, la raíz del diente de leche tiende a reabsorberse, debilitando la pieza.
- Riesgo de infección o movilidad dental.
¿Qué hacer si tienes un diente de leche siendo adulto?
Lo primero es realizar un estudio radiográfico completo para saber si existe o no el diente permanente. Desde ahí, nuestro equipo de especialistas puede recomendarte el tratamiento más adecuado.
Las opciones más habituales son:
- Conservación del diente: si está sano, no presenta movilidad y no afecta la mordida, se puede mantener bajo seguimiento.
- Extracción del diente de leche: si hay problemas estructurales, movilidad o riesgo de fractura, suele recomendarse su extracción.
- Ortodoncia o implante: en caso de ausencia de diente permanente, se puede cerrar el espacio con ortodoncia o colocar un implante dental para sustituir la pieza perdida.
- Carillas dentales: si se opta por mantener el diente pero hay una diferencia estética notable, se puede corregir con carillas para igualarlo al resto.
Tratamos casos de dientes de leche en adultos en Mallorca
En nuestra clínica dental contamos con un equipo de profesionales especializados en odontología general, ortodoncia y estética dental que estudian cada caso de forma individual. Sabemos que no hay dos bocas iguales, por eso cada tratamiento es personalizado.
Si has notado algo extraño en tu sonrisa o sospechas que conservas un diente de leche, te invitamos a realizar una valoración completa con nosotros. Con la tecnología actual, podemos ofrecerte soluciones funcionales y estéticas que mejoren tu salud y confianza.